Seguimos acerca de los pensamientos de algunos personajes de Scribere Humanum est.
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Se dirigía Dante a clase asía el picaporte, abría la
puerta de clase y saludaba a los alumnos
- ¡Salve discipuli! – decía el profesor-
- ¡Salve magister! – decían los alumnos-
"A ser
uno con todo lo viviente, volver en un feliz olvido de sí mismo, al todo de la
naturaleza. A menudo alcanzo esa cumbre...pero un momento de reflexión basta
para despeñarme de ella. Medito, y me encuentro como estaba antes, solo, con
todos los dolores propios de la condición mortal, y el asilo de mi corazón, el
mundo enteramente uno, desaparece; la naturaleza se cruza de brazos, y yo me
encuentro ante ella como ante un extraño, y no la comprendo. Ojalá no hubiera
ido nunca a vuestras escuelas, pues en ellas es donde me volví tan razonable,
donde aprendí a diferenciarme de manera fundamental de lo que me rodea; ahora
estoy aislado entre la hermosura del mundo, he sido así expulsado del jardín de
la naturaleza, donde crecía y florecía, y me agosto al sol del mediodía. ¡Oh,
sí! El hombre es un dios cuando sueña y un mendigo cuando reflexiona. "
Friedrich Hölderlin.
Fragmentos de "Hyperión" – terminaba de leer
un fragmento de la novela "Hyperión" el profesor Dante-
Los alumnos mientras reflexionaban la lectura que
acababa de pronunciar el profesor Dante quedaban asombrado por su júbilo del
profesor cuando la dijo y como la dijo. A la vez quedaron sorprendidos porque
inmediatamente de saludar, asió la novela y lo dijo sin decir alguna palabra
antes. Dicho ese fragmento de la novela y luego de un minuto para que sus
alumnos contemplaran la belleza que emergía, empezaba con este otro pensamiento
de un filósofo.
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